Archivado en | Artes

Zapata: Poesía en resistencia

Publicado el 14 marzo 2013 por manuguerrero

Emiliano Domínguez Zapata

No dudo en absoluto de una frase que leí hace algunos meses: «Una sola canción de Brel, de Jacques Brel, puede ser mil veces más contundente que un concierto entero de Iron Maiden». Y es que con el tiempo la palabra contudencia va adquiriendo un distinto matiz. Al principio se toma por la fuerza de su impacto inmediato. A cierta edad, en cambio, uno aprecia y valora que la huella o el pellizco permanezcan, que se impregnen en tu ánimo o incluso -esto se agradece- en tu forma de ser.

La tarde que conocí a Emiliano Domínguez «Zapata», hace ya algunos años, quedé impresionado, sobre todo, por el timbre de su voz. Era un chico de mi edad, rondando los 25, pero con un torrente de voz que si uno cerraba los ojos mientras él cantaba podía imaginarse sobre el escenario, perfectamente, a un señor maduro, con cierto parecido incluso al gran Alberto Cortez. Su voz era grave, sólida y precisa. Todo sonaba como debería sonar tras 20 años de carrera. Ocurría en cambio en un joven que ni siquiera tenía un disco a sus espaldas. Por entonces tocaba el piano en La Carbonería y vivía en el altillo junto al histórico Paco Lira. Entre las mismas paredes, curiosamente, donde cuarenta años antes, su padre, el maestro José Domínguez «El Cabrero», comenzaba una carrera que no precisa explicación, porque lo de El Cabrero es un mundo aparte, muy por encima, por supuesto, del flamenco institución. 

Aquella grabación con Emiliano, decía, me despertó una inaudita curiosidad: ¿qué haría con esa voz un chico que apenas empezaba en esto que llamamos arte? Mucho tiempo después tengo, por fortuna, su respuesta entre mis manos. Se llama Poesía en resistencia y es una cuidada selección de textos de poetas imprescindibles y necesarios, más si cabe ahora que andamos en franca decadencia: Cernuda, Alberti, Machado, Hernández y Benedetti. Cuenta Emiliano que llevaba años preparándolo, escogiendo poemas y aprendiendo a ponerles música (mientras otros hacían lo que ya sabemos), y ha llegado ahora, precisamente ahora, cuando estamos huérfanos de gente limpia en la que poder confiar. Por eso se agradece que haya puesto su voz, su magnífica voz, en pos del mensaje claro y útil: «Caravanas de tristeza», «Remordimiento en traje de noche», «Las palabras», «La guerra, madre», «A Neruda, con Chile en el corazón», «Miserias»… Porque quién no se estremece ahora (precisamente ahora que nos quedamos sin casas, sin sueños y sin tierra) con estos versos del sevillano universal: «Y en todas partes he visto / gentes que danzan o juegan, / cuando pueden, y laboran / sus cuatro palmos de tierra. / Nunca, si llegan a un sitio / preguntan a dónde llegan. / Cuando caminan, cabalgan / a lomos de mula vieja, / y no conocen la prisa / ni aun en días de fiesta. / Donde hay vino, beben vino; / donde no hay vino, agua fresca. / Son buenas gentes que viven, / laboran, pasan y sueñan, / y en un día como tantos, / descansan bajo la tierra.»

Porque a eso llamamos algunos contudencia y estilo. Principios. Porque con esa voz y esa madera, ya les digo, había que empezar a lo grande. Celebrando tener con nosotros a uno de los nuestros. Y espero que por mucho tiempo. 

Zapata canta «Las palabras», de Mario Benedetti.

 

Artículos relacionados

2 Comentarios en esta entrada

  1. juan jose Says:

    Muy bueno gracias zaoata , algun dia te veremos por tenerife, sulud y republica.

  2. agustin bermudez Says:

    ola a este chico, y perdonar si me ekivoco, creo k es hijo del cabrero, si es asi, e tenio el placer de conocerlo personalmente y de echarme algún cante con el, mu buen chaval, educado y respetuoso, lo conoci en Sevilla, en la carboneria. buen músico y buena persona, te deseo lo mejor, de to corazón. tu amigo agustin, sobrino de carlos Heredia. un saludo, mostro

Responder

Social Widgets powered by AB-WebLog.com.